En nuestro anterior post de Julio, hablamos de implantes dentales. Una vez que ya tenemos los implantes colocados correctamente en boca, toca realizar un buen mantenimiento de los implantes dentales. Sin olvidar las prótesis sobre los implantes y el resto de dientes.
Esto es necesario e imprescindible.
El mantenimiento de los implantes dentales debemos hacerlo por un lado en casa, nosotros mismos. Y en la clínica dental por nuestro dentista. Y los dos son igual de importantes. !!
Solo de esta manera podremos tener nuestros implantes dentales en perfecto estado. No hay más secreto.
Aunque los implantes dentales no sufren caries como los dientes naturales, sí que pueden verse afectados. Por ejemplo, por infección en las encías, por inflamación o por pérdida de masa ósea. Incluso aflojarse por el uso o el paso del tiempo. En todos los casos, la prevención es fundamental para evitar complicaciones futuras.
Gracias a esta prevención detectaremos cualquier problema a tiempo y ponerle solución antes de que sea demasiado tarde. Una complicación hoy insignificante, puede provocar la pérdida del implante, de los tejidos que lo rodean e incluso de la prótesis.
Cuida tus implantes dentales en casa
La experiencia de trabajo en la clínica nos enseña que el paciente asintomático no acude a la consulta a menos que tenga dolor o un problema. No debes esperar a que eso ocurra ¡¡¡
Siempre es importante seguir unos buenos hábitos de higiene bucodental. Con los implantes dentales lo es todavía más, ya que influirán de forma decisiva en la conservación a largo plazo. Haz tu mantenimiento de los implantes dentales que tengas.
- Haz un adecuado cepillado dental y usa la seda dental para limpiar efectivamente los restos que queden alrededor de las prótesis sobre implantes y de los dientes. Es fundamental. Conseguimos la emoción correcta de la placa supragingival y disminuir microorganismos que hacen fracasar el implante.
- No descuides la higiene bucodental si comes fuera de casa o en el trabajo. Lleva siempre a mano un pequeño kit de cepillo y pasta dentífrica.
- Además, consulta a tu dentista sobre el cepillo, colutorio, cepillo interdental, pasta de dientes y técnicas de cepillado más adecuados para tu caso concreto.
- Debes estar pendiente de los síntomas que puedan aparecer en tus implantes dentales. Un pequeño sagrado de las encías, un poco de movilidad en la pieza implantada o un aumento de la sensibilidad cuando comemos o bebemos algo muy frío o muy caliente.
No obstante, lo más habitual es que los posibles problemas que pueden afectar a los implantes dentales sean asintomáticos. Es decir, que no provoquen dolor ni otros síntomas perceptibles. Por eso son importantes las revisiones periódicas.
Las revisiones son esenciales. Acude periódicamente a tu dentista.
Para empezar, hay que realizar un control regular de la conservación del implante y de las encías, mucosas y hueso, con radiografías si es necesario.
Así, las enfermedades periodontales son una causa habitual de pérdida de piezas dentales. Hay que tenerlas bien controladas una vez hemos sustituido estas piezas por implantes.
- En primer lugar a revisión suele ir acompañada de una higiene dental realizada por un especialista. Es necesario limpiar el sarro y la placa bacteriana acumulados alrededor del implante, por encima y por debajo de la línea de las encías.
- Los implantes pueden aflojarse, ya sea por el uso o simplemente por el paso del tiempo. Esto se detecta y se soluciona fácilmente en una revisión. Solo tiene que limpiarse y volverse a colocar. Si no se hace esto, la movilidad del implante, por pequeña o soportable que nos parezca, puede comportar problemas en su funcionalidad o duración.
Un buen mantenimiento de los implantes dentales es fundamental para que nos duren toda la vida.
Los implantes dentales son un gran paso en la salud y en el bienestar de las personas que los llevan. Ademas son una inversión y un esfuerzo en pasar por la intervención. Vale la pena cuidarlos y proporcionarles la atención que requieren. Así nos durarán y funcionarán perfectamente toda la vida.